Me quiero ahora-aquí-ahora
La Premen se acerca y este ciclo me he hecho la promesa ferviente de que llegaré suave a los abismos. Como merecen, como merezco. Estoy harta de llegar en caída libre al tiempo de la progesterona.
La Premen se acerca y este ciclo me he hecho la promesa ferviente de que llegaré suave a los abismos. Como merecen, como merezco. Estoy harta de llegar en caída libre al tiempo de la progesterona.
La menstruación llega cuando el cuerpo se queda sin estrógenos ni progesterona. Es un momentazo. Yo lo siento como esa pausa entre inhalar y exhalar. Ese instante en el que todo cambia. Y como somos cíclicas, todo empieza otra vez.
Estoy enfadada. Dentro un nudo grande no me deja respirar.
Y sí, escribo sin filtro cuando me encuentro así.
Pongo la lengua en el paladar y abro mi pecho como si de un paracaídas se tratase.
Cojo aire hasta el fondo. Sigo aquí. (Menos mal)
Lo que tienes a continuación es uno de esos textos que guardo bajo llave. Este lo compartí en la comunidad después de hacer una lectura de mis últimos meses de registro y hoy quiero compartirlo contigo por varias razones.